Museo de la Medicina

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 El Museo de la Medicina ya es una Realidad

Los diferentes hechos históricos y  el respeto hacia los profesionales de otras épocas, quienes supieron transmitir el conocimiento para que las siguientes generaciones puedan perfeccionarlos, merecen un espacio en donde nos permita mirar hacia el pasado y comprender  el esfuerzo que  transitaron.

Hoy y mediante este relato quiero invitar a todos los profesionales de la salud de rosario y sus alrededores a participar de este proyecto que tendria apoyo oficial por parte de las autoridades.

Creo que el museo de la salud en rosario es posible, muy probablemente con menos material que en los diferentes museos de la medicina que se pueden visitar en Francia o en otros países europeos, pero si que refleje con orgullo nuestra corta pero rica historia. Finalmente seria un homenaje a los grandes médicos y profesionales de la salud que hicieron de rosario un polo asistencial muy importante en Sudamérica.

Un  justo homenaje  no solo a los profesionales de aquellos tiempos sino también a los pacientes que se beneficiaron a causa del progreso cientifico.

No quiero olvidarme de la historia y de los innumerables seres humanos que dignificaron una carrera tan bella como la medicina.


Recorrido por el Museo

Entrevista con el Doctor Héctor E. Ruiz Fundador del Museo

Galeria de Fotos

Datos Curiosos de la Otorrinolaringología

  • La cirugía plástica apareció por primera vez en De Curtorem Chirurgia Per Insitionem, escrita en 1597 por Gaspar Tagliacozzi (1546-1599): el proponía reconstruir la nariz, los labios y el paladar para así reparar y ocultar los daños provocados por la sífilis, nombrada por primera vez en 1530. Sin embargo, fue terminantemente condenada por la Iglesia ya que, según proclamó, era una ofensa para Dios intentar mejorar su obra.

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  • Los senos paranasales fueron descubiertos a causa de la extracción de un diente: en 1651 una mujer acudió Nathaniel Highmore (1613-1685) aterrorizada ya que había intentado insertarse un diente de plata en el lugar que había quedado vacío y este “siguió de largo”, por lo cual ella pensó que el metal había ingresado en su cerebro. El médico inglés hizo una investigación pormenorizada y publicó su descubrimiento en Corporis Humanis Disquisitio Anatomica, no sin antes tranquilizar a la mujer.

 

  • A Conrad Victor Schneider (1614-1680) se le debe el descubrimiento de que los senos museo2paranasales están vacíos: este dato, publicado en su De Catarrhis,echaba por el suelo las “teorías” de que contenían líquido para lubricar los ojos o espíritus de animales (de ahí los sonidos cuasi-salvajes que producimos al estornudar o roncar).

 

  • Una industria que surgió junto a las de ayudas para hipoacúsicos fue aquella que buscaba como esconder esos instrumentos o museo3al menos disimularlos. En Inglaterra se había creado una trompetilla que podía pasar perfectamente por florero y usarse para decorar una mesa; escondites comunes eran abanicos de seda, mangos de bastones, accesorios para el cabello, sombreros e incluso sillas y otros muebles. La era de las ayudas eléctricas trajo una reducción en el tamaño, pero no en el miedo a ser descubierto: es así que los instrumentos se montaban en el marco de anteojos o, como se hace actualmente, se usaban materiales del color de la piel del paciente.
  • El doctor Chevalier Q. Jackson (1865.1968) relata que, a lo largo de su carrera, trató a muchos niñosmuseo4 cuyas gargantas se encontraban dañadas por el consumo de lejía: estos les impedía ingerir alimentos y bebidas, por lo cual muchos terminaban muriendo de hambre y sed. La causa de esto es que este material altamente alcalino es muy parecido visualmente al azúcar, y era empaquetado en los EE.UU. en forma similar a esta y sin ningún tipo de advertencia. El doctor Jackson lanzó una campaña a nivel nacional para lograr una toma de consciencia sobre este problema, e influyó mucho para la sanción del Acta Federal de Veneno Cáustico en 1927.


Curiosidades de Personalidades Históricas

  • museo_clip_image010El sacro emperador romano germánico Carlos V (también conocido como Carlos I de España) llevaba siempre consigo una bolsa con gusanos de seda desecados para así protegerse del vértigo.

 

  • museo_clip_image012Jonathan Swift (1667-1745), conocido por ser el autor de Los Viajes de Gulliver, fue también un renombrado satirita por sus contemporáneos (en realidad, Los Viajes de Gulliver es una gran sátira que él, como irlandés, hace de los ingleses y su agresiva política exterior imperialista). Ya desde su juventud él experimentó breves períodos de sordera, acompañados por debilidad y malestar. Hoy en día se cree que padecía de la enfermedad de Méniere, un desorden en el oído interno: en su caso en particular, la causa pudo haber sido una obstrucción en la trompa de Eustaquio provocada a su vez por un septum desviado.

 

  • museo_clip_image014Franz Joseph Haydn (1732-1809) es uno de los compositores menos conocidos del período clásico, a pesar de haber sido mentor de Beethoven. Sufría de recurrentes pólipos nasales crónicos, que aparecieron a lo largo de tres décadas. Se realizaron cuatro operaciones en las que se ligó, extrajo y escindió, pero los malos resultados y lo doloroso del proceso hizo que Haydn se volviese escéptico.

 

 

  • museo_clip_image016George Washington (1732-1799), general de los Estados Unidos durante su Guerra de Independencia y primer presidente del país, tuvo una muerte algo extraña y controversial. Una fría y húmeda tarde de invierno de 1799 salió a dar su caminata diaria, y como consecuencia de esta desarrolló carraspera, difonía y fiebre en los días siguientes. EL diagnóstico al que el grupo de médicos que los atendía llegó fue el de una inflamación de la garganta acompañada por fiebre, tos y molestias al tragar. Se propuso hacerle una traqueotomía para aliviar el dolor, pero se descartó la idea por considerarse peligrosa la operación: es así que se lo sangró, haciéndole perder un total de tres litros de sangre. Washington murió debido a la combinación de la infección de estreptococos en la garganta, asfixia y deshidratación debido a la inflamación, y por el shock y debilitamiento causados por la gran pérdida de sangre.

 

  • museo_clip_image002_0000Ulysses S. Grant (1822-1885), conocido general de la Unión durante la Guerra de Secesión Norteamericana y decimoctavo presidente de los Estados Unidos, era popular por su afición a los cigarros. Había adquirido el hábito a una edad temprano, y una vez admitió que fumaba un promedio de doce al día. Esto le provocó un carcinoma en el pilar tonsilar derecho, que se le diagnosticó en 1884. El cáncer, de carácter maligno, se encontraba en su lengua, y las técnicas quirúrgicas de la época no eran lo suficientemente avanzadas como para detener su crecimiento. Lo único que se le administraba era una solución de hidroclorato de cocaína para paliar el dolor. Grant murió un año después, volviéndose el único presidente estadounidense en morir de cáncer hasta la fecha.

 

  • museo_clip_image018Johannes Brahms (1833-1897), compositor alemán famoso por su combinación de los estilos romántico y clásico, pudo haber desarrollado apnea de sueño en su vejez. Este trastorno se produce cuando el paladar blando en la parte posterior de la garganta impide la llegada de suficiente oxígeno al cerebro, y tiene como síntoma principal fuertes ronquidos. Brahms reconoció que roncaba fuerte, y su físico (un cuello ancho y una caja toráxico pesada) creaban un lugar apropiado para el surgimiento de la apnea.

 

 

  • museo_clip_image020Oscar Wilde (1854-1900), conocido y controversial escritor y dramaturgo irlandés, era hijo de un hábil y reconocido otólogo, lo cual le ayudó mucho porque ya desde niño sufría de recurrentes infecciones en el oído. Estas se agravaron cuando, entre 1895 y 1897, Wilde estuvo en la cárcel sin poder tratarse. Tres años después murió, supuestamente por un coleostoma, que destruyó los huesos de su oído medio y se expandió al oído interno y, luego, al cerebro. Otros creen que el murió por una meningitis.

 

 

  • museo_clip_image022Thomas Alva Edison (1847-1931) es conocido por sus numerosas invenciones, entre ellas la bombilla de luz y el fonógrafo. Es menos conocido el hecho de que era casi completamente sordo: un brote de fiebre escarlatina durante su adolescencia dejó su oreja izquierda completamente inutilizada y la derecha perjudicada en un 80%.

 

 

 

 

  • museo_clip_image024Sigmund Freud (1856-1939), el padre de la teoría psicoanalítica que hizo invaluables aportes a la psicología, la educación y la sociología, era adicto al tabaco. A pesar de haber intentado abandonar el vicio en numerosas ocasiones, fracasó en todos ellos lo que le trajo serios problemas de salud, como cáncer en la mandíbula y una úlcera maligna en su paladar duro. Debido a esta última fue operado en varias ocasiones, pero su crecimiento no pudo ser detenido y se expandió a la parte superior de su mandíbula inferior, la base de sus órbitas y, eventualmente, a sus mejillas. Las intervenciones sólo provocaron más dolor en Freud, que murió por una combinación de estos padecimientos y sobredosis de morfina.

 

  • museo_clip_image026Frank Sinatra (1915-1998) sufrió una hemorragia en las cuerdas vocales en 1952, debido al exhaustivo uso que hizo de su voz durante una laringitis. Si bien el daño físico fue leve por lo que en 1953 ya se había recuperado plenamente, este período de inactividad bastó para dejarlo fuera del juego artístico: para recuperarse obtuvo el rol de Maggio en De Aquí a la Eternidad, por el cual ganó el Oscar a Mejor Actor de Reparto. Para el final de la década había vuelto a actuar y a grabar discos, construyéndose como una leyenda de la música del siglo XX.

 

 

 


Fuentes